Ir al contenido principal

Deseo

El deseo es una tensión hacia un objeto que falta. Es la experiencia de una carencia, de una insuficiencia, lo que nos empuja a buscar un objeto considerado como fuente de satisfacción.

Dominio de los sentimientos = dominio de los afectos El sujeto es pasivo ante las sensaciones. El sentimiento es el efecto de las sensaciones sobre el sujeto, en su interior. Es una sensación de segundo grado. Pasión, emoción, deseo: La pasión se refiere a un deseo exclusivo de tal manera que la mente se enfoca en un objeto para excluir a los demás. A diferencia de la emoción, la pasión es duradera y dura en el tiempo sin perder su intensidad. La emoción es algo efímero.

Perturba la razón y la inhibe por un tiempo. La pasión todavía puede pensar, la razón todavía tiene una acción. A menudo asimilamos el deseo y la voluntad. Es verdad que el deseo es una fuente de movimiento y por lo tanto de voluntad. Deseo sinónimo de vida, carácter de productor de acciones. Parece estar asociado con la libertad. Los límites impuestos al deseo son vividos como límites a la libertad. Parece ser la condición del placer que viene con la satisfacción de una carencia.

Hay por lo tanto una oleada de felicidad que parece ser la satisfacción de mis deseos, de manera duradera. El deseo siempre se renueva, parece insaciable. Por lo tanto, la felicidad es inaccesible. Hay, entonces, una pasividad en el deseo, algo que no es de elección propia que ocurre sin una decisión. Es infinita por la extensión de los objetos posibles y por su incesante renacimiento de modo que la felicidad nunca es realmente accesible (=> decepción, desilusión.

Podemos distinguir entre necesidad y deseo. Ambos son la experiencia de una carencia. La necesidad es necesaria, no podemos prescindir de ella mientras que el deseo no lo es. La necesidad es necesaria para la vida (por ejemplo, comer), está determinada y puede ser satisfecha. El deseo es que lo superfluo sobreviva. Es indeterminado, indefinido y parece insatisfactorio a largo plazo. Tiende a su propio fin, pero su satisfacción parece llevar a la desgracia del sujeto, al aburrimiento.

Existe una ambigüedad del deseo entre actividad y pasividad, entre felicidad y sufrimiento, entre libertad y alienación. Para el hombre, la realización de su vida es difícil: no basta con satisfacer sus necesidades vitales por sí solo. ¿Cómo lograr una vida libre y feliz? ¿Cómo tratar con un deseo? ¿Debemos buscar satisfacer el deseo y la pasión? ¿Deberíamos intentar controlarlos o eliminarlos? ¿Es el deseo sólo negativo o positivo?

Comentarios

Entradas populares de este blog

Westworld episodio 4: Revelación de uno de los secretos de la serie

Bienvenidos a este análisis del cuarto episodio de Westworld. Este artículo llega un poco tarde, ya que estoy mas metido con temas de actualidad y politica… Siria por ejemplo. Bernard en el ojo de Dolores